¿Cuántas veces nos hemos imaginado a nosotros mismos en una escena que estamos viendo?
Ver una película y que la escena de amor te la imagines junto a una persona en particular; que en la escena de amistad te venga alguien a la mente. Y preguntarte si, tal vez, a otros les viene tu imagen o si se imaginan junto a ti en esas escenas.
A decir verdad, estamos siempre recordando cosas, todo lo relacionamos con algún suceso anterior. Dependemos de la gente y de los recuerdos que dejaron en nuestra memoria.
Dicen que depender de alguien es malo, incluso lamentable.. Que sólo tenemos que depender de nosotros mismos, puesto que somos quienes siempre permaneceremos ahí.
A mí me parece bonito. Eso de estar tan unido a alguien de forma que dependas de él en algunos aspectos. Necesitar su compañía, aunque no siempre sea física. Necesitar su comprensión y su apoyo para no sentirte tan solo. Necesitar su sonrisa para continuar siendo feliz. Y saber que esa persona te necesita del mismo modo.
Y necesitar a alguien no es estar pegado a esa persona en todo momento, sino tener la seguridad de que eres -al igual que lo es para ti- una pieza clave en su vida, un pilar que le sujeta, la cuerda a la que agarrarse si va a caer.
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