¿Cómo se puede echar de menos algo que nunca has tenido? ¿Algo que sólo has sido capaz de imaginar, porque no ha existido la ocasión de que pasase? Hacerte cada vez más y más ilusiones para luego sólo poder decepcionarte ante el resultado.
Decepción al descubrir que nada de todo eso va a pasar.
Pero claro, es taan sumamente bonito mientras lo imaginas, que no te paras a pensar en su improbabilidad.
Hacerte ilusiones a base de cuatro palabras dichas. Ilusiones a base de conclusiones precipitadas o simplemente ilusiones a base de malentendidos.
Esas ilusiones que sólo sirven para darte de bruces con la realidad y pensar que, probablemente, esas palabras también son dichas a otras personas y que habría que haberse tomado las cosas con más calma o desde otra perspectiva para no sacar esas conclusiones equivocadas.
Y dicen que de ilusiones se vive, pero da la sensación de que es al contrario, y que más que vivir, se muere.
Creo que eso es lo que echo de menos, por mucho que se sufra a veces. No tener apenas ilusiones y ver desde el principio la parte negativa de algo, aunque luego aparezca la positiva con el tiempo. Pensar que todo va a salir mal sin siquiera haberlo intentado para comprobarlo.
Aunque bueno, a lo mejor es mejor pensar así y luego sorprenderte, a creer que todo saldrá bien y luego descubrir que te equivocabas.
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